La Sinfónica Nacional con Stefan Lano
La Ballena Azul
Viernes 26 de Junio de 2015
Escribe: Néstor Echevarría
Concierto de la Orquesta Sinfónica Nacional.
Programa:
- Concierto para Cello y orquesta en Si menor, op.104 de Antonin Dvorák
- Sinfonia Nº 11 op.103 de Dmitri Shostakóvich
Director: Stefan Lano. Solista:
Enrico Bronzi (violonchelo)
Fue un triunfo importante del director nacido en Boston, Stefan Lano,en esta ocasión, reapareciendo ante nuestro público tan habituado a sus interpretaciones años atrás. Esta vez, en la recientemente inaugurada sala La Ballena Azul, logró inculcar a la Orquesta Sinfónica Nacional un estimulante sesgo colectivo, al punto de lograr de ella un desempeño destacado, de impecable sincronía, al ejecutar fundamentalmente la Sinfonía Nº 11, opus 103 , llamada “El año 1905”, del compositor ruso nacido en San Petersburgo, Dmitri Shostakóvich (1906-1975).
      Esta  obra, que apela a multiplicidad de timbres instrumentales, fue compuesta por el  compositor ruso evocando un episodio del año 1905 (de ahí el subtitulo que  se le añade) donde las fuerzas del zar Nicolás  I reprimen duramente un  levantamiento  popular.
      Por  eso existe en ella una intención programática plasmando en forma sonora y  durante  poco mas de una hora,  aquella sublevación antizarista , desfilando  en sus cuatro movimientos , escenas de la plaza del palacio ,desde compases animados  y una orquestación asaz virtuosa hasta una marcha fúnebre y tenebrosas compases  evocativos con las cuerdas. Todo  genera  fuertes contrastes entre lo dramático y lo exultante.
      Pareciera  que la misma fue puesta en programa para probar la excelente acústica de la  sala sinfónica La Ballena Azul,  sede  ahora de la OSN., repleta de público, congraciándose  con el apreciado director estadounidense luciéndose con este prolífico  representante de la música rusa, conflictivo a la vez en el cariz político, cuya  producción abarca mas de una docena de sinfonías, varias óperas (conocidas también  en nuestro medio )y conciertos instrumentales,. además de música para cine y  ballet.
      En  la primera parte se había ofrecido el Concierto en Si menor para violonchelo y  orquesta, del  compositor checo Antonin  Dvorák. De los dos conciertos que compuso en esta tipología (el otro muy temprano  en su carrera) este es el mas representativo y data de 1895 . 
      El  instrumento solista  fue tratado con  sensibles acentos en sus cuarenta minutos por el visitante Enrico Bronzi,  italiano, oriundo de  Parma,  que demostró   empatía con  esta obra,  y su  “toucher”  tanto en los pasajes mas inspirados del autor, como   el romántico   “adagio”(segundo movimiento) y en el  resto de la partitura,   mostró  una solvente interpretación  con  una  atildada conjunción con la orquesta.
      En  resumidas cuentas, dos obras representativas de estas dos personalidades de la música,  que fueron motivo de versiones lucidas con la reaparición de Lano, festejada  largamente al finalizar. Y además, una forma de exhibir las posibilidades del  flamante auditorio demostrando sus cualidades acústicas.
                                                                                            Néstor Echevarría

